First published by Agencia EFE in September 2009
Cien por cien algodón, puntillas, un estilo romántico que inspira libertad y el blanco como color de referencia constituyen los componentes básicos de la moda ibicenca denominada Adlib.
Fue la moda Adlib la que acuñó el lema “viste como quieras” y que se asocia inmediatamente con Ibiza. Un estilo que genera unos 18 millones de euros anuales de ingresos.
El famoso diseñador ibicenco Luis Ferrer recuerda muy bien los orígenes de esta moda, “hace veinte larguísimos años”, allá por los años setenta, marcados por el movimiento “hippie”, cuando esta isla mediterránea del archipiélago balear se vio invadida por jóvenes idealistas de pelo largo. Entre estos jóvenes se encontraba el propio Ferrer y la célebre creadora Smilja Mihailovich.
De hecho, Ferrer rechaza la definición de que el grupo estuviera formado por “hippies” y describe a sus impulsores como “personas que habían recorrido el mundo”, que luego se encontraron en la isla y plantearon hacer un desfile.
Así nació la moda Adlib, cuyo nombre deriva del latín ad libitum, que traducido al español significa “hacía la libertad”.
PROYECCIÓN AL EXTERIOR
A este grupo de jóvenes diseñadores se añadieron más adelante otros talentos como Juanita Díaz, Melania Piris, Francisca Ferrer o Maru García, que actualmente siguen trabajando la moda Adlid.
El conseller de Trabajo y Desarrollo Empresarial de Ibiza, Juan Serrá Mayans, destaca el “peso” del papel que juega la moda Adlib en la proyección de la isla en el exterior, tanto hoy como, sobre todo, en los setenta.
La influencia sobre modistos de todo el mundo queda patente en las pasarelas internacionales donde, según Ferrer – que prefiere Londres por encima de todas-, cualquier prenda blanca en los desfiles lleva a los diseñadores a susurrar por lo bajo la inevitable evocación de Ibiza.
La fuerte asociación entre la moda Adlib y la isla de Ibiza no es sólo una sensación etérea sino que se concreta como una potente fuente de ingresos. El conseller Mayans estima que genera unos 18 millones de euros anuales.
Mayans también subraya el peso que tiene la moda Adlib en la representación exterior de Ibiza, pero puntualiza que con el tiempo se ha vinculado a otros componentes “muy importantes”, como la artesanía, la música, la gastronomía o la restauración, generando una “sinergia” y creando un efecto “diferenciador” en la promoción de esta isla respecto a las otras dos del archipiélago.
DISEÑOS VERSÁTILES
El máximo exponente de la promoción de la moda ibicenca es la pasarela Adlib, que se celebra cada verano, aunque el presidente de la asociación de creadores de moda de Ibiza y diseñador, Anthony De Bois, menciona también el “beneficio incidental” de las fiestas veraniegas de la isla, donde celebridades y famosos vestidos con este estilo inspiran a los potenciales clientes.
Otra de las ventajas que, según Ferrer, aportan estos diseños es su versatilidad, ya que la Adlib se puede llevar “tanto en la playa como en la discoteca”.
Las vaporosas prendas blancas no son ajenas a los vientos que azotan la economía. De Bois suspira y admite que en este año de crisis global, las ventas han sido “difíciles, bajas y erráticas”.
En ese contexto de crisis, De Bois ha decidido lanzar para la próxima temporada una colección de fantasía, y además sorprenderá con una línea basada en “el componente precio”, con el fin de ser asequible a todos.
Ferrer tampoco esconde que este año ha vendido “un poco menos”, pero es positivo e idealista de cara al futuro al comparar la moda Adlib con “un vaquero” clásico: “Quien la compre una vez, volverá a hacerlo”.
Escrito por: Ilona (iK, x)